“El Chango” José Luis Pintos Saldanha es más conocido por sus anécdotas en el fútbol que por su carrera internacional (a pesar de que fue campeón de América y del Mundo con Nacional, de América con la Celeste y fue mundialista). Lo que pasa con el “Chango”, es que el personaje es mucho más fuerte que el jugador.
Una de las más notables anécdotas se dio en Inglaterra, en el famoso estadio de Wembley en 1990, en ocasión de un amistoso con la selección inglesa, preparatorio para el mundial de Italia. Pintos Saldanha era una alternativa a los laterales titulares José “Pepe” Herrera y Alfonso Domínguez, y se moría por tener la chance de jugar de titular o al menos entrar a ese escenario tan histórico.
Cuando Uruguay fue a reconocer el campo, Pintos Saldanha no paraba de repetir una y otra vez: “qué lo parió… parece una alfombra esto… es notable.. yo no me puedo quedar sin jugar en esta cancha”. El día del partido lamentablemente Pintos comió banco, pero esto no calmó su ansiedad por dejar sus tapones estampados en esa alfombra, y así fue que en una jugada en la que el lateral derecho José Herrera fue a sacar un outball cerca del banco de suplentes celeste, al preguntar cuanto faltaba, el técnico Tabárez no lo escuchó ya que estaba dándole instrucciones a otro jugador.
Al percatarse el entrenador de que el jugador le había hablado y no lo había escuchado, le pregunto al “Chango”: “¿que dijo?”, a lo que el jugador respondió: “pidió el cambio maestro…dice que está cansado..”, cuando el técnico se disponía a hacer el cambio y Saldanha pensaba que su sueño se iba a concretar, le avisaron a Tabárez que era una broma del jugador y Herrera siguió en la cancha hasta el final. Cerca estuvo el “Chango” de poder concretar su sueño y pisar Wembley.
GRANDE CHANGO! QUE VUELVAN LOS JUGADORES PÍCAROS, QUE VUELVA LA CELESTE DE ANTES!!!