Ya nos ocupamos hace unos días del pase del hijo de Pablo Forlán al fútbol nipón y de su mamada a todo el gobierno japones “Realmente las autoridades del fútbol japonés con el apoyo del Gobierno pusieron mucha voluntad y ganas para concretar el acuerdo”.
Con el pelo teñido de mujer y un evidente tratamiento facial, El hijo de Pablo y actual representante del bocatorcidismo mundial fue presentado en el club Cerezo Osaka de Japón. Sus primeras palabras las ensayó en japonés. Tras recibir aplausos de los periodistas presentes, siguió con la conferencia de prensa hablando en portugués, ¿éste es brasilero o oriental de los de acá?
“Antes de llegar a Japón estuve aprendiendo el idioma en la embajada de mi país para entender un poco, es una lengua muy diferente a la nuestra. Hay que ir de a poco porque no es fácil” éste si que sabe prender la computadora diría el mago, “e un fenomená e verdá”. Algunos indican que algo de obdulista debe tener el hijo de Pablo al haber compartido plantel con los prohombres y haber sido elogiado por el Mago, pero sinceramente no nos importan otras opiniones.
Al iniciar la rueda de prensa afirmo: “Estoy con mucha ilusión de empezar a jugar. Es un fútbol muy técnico y veloz” No tiene vergüenza este muchacho, mejor que no venga a estropear lo conseguido en este periodo de pases, al traer dos tecnicos con VVVV a los eqiupos grandes y nutrir de varios obdulistas en nuestros fields.
Nuestro dios Obdulio, el tenia al japonés como un futbolista de muy poca calidad. Para arengar a sus compañeros en el vestuario les decía que el rival eran “unos japoneses” como denigrándolos. Mejor así, quédate en el otro oriente que acá en Uruguay seguimos repatriando viejos valores.