Esta joya fue subida a la interné por un ciudadano obdulista del que lamentablemente no sabemos el nombre, pero todos debemos estarle agradecidos. Hoy lo ponemos a disposición para que lo puedan disfrutar todos aquellos que se identifican con lo que pregonamos en esta página, Corría el año 1992 cuando este camarada cultor de los Viejos Valores grabó este documento histórico de la televisión, que hoy pudo poner en el iu tú.

Esas eran épocas en las que la televisión se dignaba a pasar este tipo de materiales, para que las nuevas generaciones crecieran viendo quienes habían sido los grandes que nos dieron tanta gloria y respeto en el mundo entero. Quiso el destino que esa única vez que se emitió este discurso en el Canal 10, este buen hombre tuviera la fortuna de poder grabarlo, ya que es un material que no debe quedar en el olvido.

Obdulista, aproveche y muéstrele a sus botijas al Mariscal hablando, como nunca lo vió! Muchos de nosotros nunca soñamos poder escuchar al gran José Nasazzi dando un discurso tan emotivo, en reconocimiento a sus compañeros de mil batallas. Que baluartes aquellos!!! Esos nenes jugaban finales y las ganaban todas, y además tenían el detalle de recordar a los que ya no estaban con su silla, y alzando una copa hablaban de unos valores hoy en día cada vez son más escasos.

Hoy en día se quejan de que el muñequito no quedó parecido, o de que los cereales no son los que les gustan. El Gran Capitán de la primera época gloriosa Jose Nasazzi, líder de la Seleccion Uruguaya desde 1923 a 1936. Fue el símbolo de la denominada Generación Ganadora de los años 20 y los 30. Aquí tenemos la oportunidad de ver y oir a Nasazzi en un discurso realizado en una fiesta realizada por la AUF en homenaje a los campeones de 1924, 1928 y 1930.

Disfrútelo usted, compañero, usted que jamás soñó con ver esto. Emociónese con la voz del Mariscal, y contenga las lágrimas para que no lo vea la patrona ni los gurises. Aunque muchos lo imaginaban con voz más gruesa, la verdad que estremece escuchar la voz del Gran Capitán. Este discurso bien vale para que cualquier selección salga a comerse la cancha y aprenda el valor de la amistad y el compañerismo.

Como bien decían los que lo conocieron, Nasazzi era como un monumento que caminaba. Ahora lo podemos ver hablando y comprobarlo. “Señores! Mis compañeros de 3 cruzadas me han honrado una vez mas para que agradezca en su nombre esta magnifica fiesta, el destino quiso que fuéramos nosotros los protagonistas en las conquistas de dos campeonatos olímpicos y uno mundial, no creo traer una nota triste a esta espléndida fiesta, recordando a los compañeros que ya no existen porque ellos están en nuestra mesa y nuestros recuerdos, celebremos pues nuestra fiesta, brindando porque nuevos gajos del laurel olímpico signen en el futuro la frente de nuestros jugadores”