Hoy juega la selección en el último match amistoso ante un combinado de ciudadanos uzbekos, momento ideal para el despliegue de todas las expresiones imaginables del calendarismo. ¿La última? Se va a armar un mosaico para que la gente demuestre su agradecimiento a los jugadores, incluso viene con detalladas instrucciones sobre en qué momento desplegar los carteles. ¿La penúltima? Habrá una “Fan Fest” con plaza de comidas, juegos, música en vivo y pantalla gigante en las inmediaciones del Centenario para despedir al combinado en su duelo ante Uzbekistán. Sobre este evento, va un nuevo “A favor y en contra” que sale de lo habitual. Incluso, se invierte el orden, poniendo primero los puntos “en contra” y luego los “a favor”.

En contra:

  • El evento busca reunir gente “que busca diversión” en la previa, durante y después de un partido de fútbol. Que vayan al cine o a bailar, el coloso de cemento es un lugar sagrado y no va de la mano con la diversión.
  • El objetivo es que el público local se entretenga y se contagie “el amor por la camiseta”. Mire si en otras épocas había que incentivarle el amor por la celeste a la gente o a los jugadores. ¿Y entretenimiento? ¡Entretenimiento es la novela de las 5!
  • Se venderá el “Vaso Celeste” a 60 pesos dentro de fuera del Centenario y lo recaudado será a beneficio de la Fundación Celeste. ¿Puede haber más formas de lucrar?
  • Habrá una gran plaza de comidas con “fudtracks” que servirán: hamburguesas, crepes, pizzas y golosinas (¿Ya le estamos vendiendo ositos de gelatina y malvaviscos al público futbolero uruguayo? ¿Qué sigue, un spá abajo de la tribuna Ámsterdam?)
  • Se decidió no vender alcohol porque no va de la mano con el espíritu deportivo ni con la Fundación Celeste. Antes teníamos jugadores que almorzaban con vino antes de un partido, no pierda eso de vista. Tampoco olvide los memorables vasitos amarillos con letras rojas que tan buena compañía nos hacían.
  • Los hinchas podrán pintarse la cara y se les regalarán globos. Al lado de la palabra “Calendarismo” en el diccionario, debería ir esta sentencia.
  • Se instalarán espacios para el juego: fútbol tenis y tiro de penales, perdiendo de vista a qué se va al Estadio, claramente.
  • En la pantalla gigante se proyectarán videos que repasen lo mejor de la Eliminatoria rumbo a Rusia 2018, ocultando la rica historia de sufrimientos y repechajes (incluso vividos por esta misma selección). Pasó un ejecutivo de Disney y dijo que le pareció demasiado empalagoso todo.

 

A favor:

  • La entrada es libre, en uno de los pocos guiños al obdulista de a pie que pueda pasar por ahí y vea algo que le interesa.
  • El evento es al aire libre y no se suspende por lluvia. Bien, algo es algo. El que no se mojó alguna vez en el Monumento al Fútbol Mundial, no merece portar una cédula de identidad de este país.
  • En la plaza de comidas, también habrá elementos típicos de nuestra gastronomía como:  parrilla, panchos, churros y golosinas (suponiendo que sea el viejo y querido pó acaremelado de toda la vida)
  • Sonará candombe y un grupo de murguistas cantará canciones de la Selección y clásicos de Momo, por lo menos no toca Rombai o algún Disc Jockey. Las tradiciones se respetan, aunque las cuerdas de tambores antes eran espontáneas y no había que exhibirlas como una atracción.
  • En la pantalla gigante se proyectarán los trailers de las películas Mundialito, Maracaná y Sangre de Campeones (aunque muchos calendaristas descubran en ese momento que la celeste de antes también ganó cosas, incluso más).

Índice de metrosexualidad: 10/10

Un tipo de evento que, esperamos, no se vuelva a repetir. Cierre los ojos, y piense en aquellas previas llevadas adelante por Omar Gutiérrez sin más armas que su oficio y el sonido de las bandas de Pop Latino de los primeros años del siglo 21. Piense en aquellas espontáneas expresiones de reunión del pueblo uruguayo en torno a once muchachos vestidos de celeste, recuerde de dónde venimos y piense si es este tipo de cosas lo que queremos. Capaz no se da cuenta ahora, pero en algún momento lo hará. Menos Fan Fest y más expresiones de espontaneidad.