Uruguay venció por 2-1 a Argentina, en un gran partido que terminó en una bella batalla campal en la arena, y nos clasificó a semifinales de la segunda edición del Mundial de Fútbol Playa, que se disputaba en Copacabana, tierras ya conquistadas por nuestros charrúas.
Los celestes (que vistieron de rojo) vencieron con dos goles anotados en los últimos minutos, uno de ellos tras no devolver un balón sin respetar el tan aclamado FAIR PLAY y tras una serie de provocaciones y faltas, hicieron entrar a los argentinos (como siempre los charrúas demostrando quien manda).
La escuadra argentinita anotó su gol por intermedio de Santiago Hilaire, cuando faltaban seis minutos para el final del partido. Cuatro minutos después el crack uruguayo Miguel, ignorando totalmente el FAIR PLAY, estrelló en el poste rival un balón que según FIFA tendría que haber devuelto al portero Salgueiro y como este salió del área para buscar el balón que supuestamente le pertenecería, el árbitro sancionó una falta que el charrúa Ricar aprovechó para empatar.
Desde ese momento, una serie de empujones, provocaciones, faltas y peleas en la banca interrumpieron el partido. El árbitro incluso tuvo que expulsar al técnico argentino, Héctor Pedraza.
Las cosas se agravaron aún más cuando Uruguay, incentivado por los gritos de la torcida brasileña (que no se sacan más el maracanazo, pero igual nos quieren) y a pocos segundos del término del partido, convirtió el segundo tanto mediante el cobro de otra falta.
Irritados, los argentinos comenzaron a insultar a los uruguayos, de esta manera, y como indican los viejos valores, los charrúas se impusieron tanto con el balon como conlos puños, y dieron inicio a una batalla campal que obligó al árbitro a finalizar el compromiso antes de tiempo.
Tras imponerse en el clásico sudamericano correspondiente a los cuartos de final, el elenco oriental se midio con Francia, ganandole en el alargue, para luego quedarse con la plata en la final contra los locales.
Si habrá que recordar estas hazañas, mostrárselas a nuestros hijos y que sepan como se defiende la camiseta en el exterior, como se demuestra la hombría, al igual que lo demostraron nuestros antecesores!