En su nueva faceta como DT, nuestro prohombre Paolo Montero, el eterno capitán, tiene códigos bien claritos: promete sinceridad, quiere un capitán que hable poco y haga mucho, y respetará al que se equivoque. Uno de los últimos próceres de nuestra Celeste ha declarado que va a buscar ser lo más justo posible. “Lo más importante es ser claro, ya de una, apenas llegado, para que después no digan que vos habías dicho tal cosa y cambiaste. Creo que siendo sincero y siendo claro, con sentido común, siendo honesto, el jugador entiende las cosas”.
Sencillito, Paolo expresó que lo mismo que buscaba como jugador lo va a hacer como técnico, esa es su idea. “Siempre busqué ser un jugador claro, pienso que nunca cambié las cosas que dije”.
Montero siempre fue un líder que peleaba por sus compañeros, sobre todo en la etapa de la selección, y ahora le toca estar del otro lado. “Lo que sí voy a aprender es que el jugador que me venga a reclamar algo se lo voy a respetar, eso sí. No voy a pensar que es problemático. Él es la voz cantante del grupo, en ese sentido estoy convencido”.
¿ Cómo va a ser un capitán del equipo de Montero? No sorprende que el gran Paolo quiere que su capitán sea a su imagen y semejanza. Un tipo que haga, que hable poco y haga mucho. Una cuestión de principios de vida para el gran capitán, a quien tampoco le gusta decir mucho, pero cuando hubo que estar, siempre estuvo para el grupo. (a ver si este mensaje le llega a “la tota”).
Ahora la pelota está en la cancha de los botijas, para ver si saben asimilar las enseñanzas de este prócer. Paolo con su sabiduría guiará nuevas generaciones de obdulistas, ojalá que hacia el fin del bocatorcidismo y el metrosexualismo, aprendiendo los códigos de los jugadores de antes. QUE VUELVAN LOS CAPITANES DE ANTES, QUE VUELVA LA CELESTE DE ANTES!