Como tantos otros guerreros que no le rehuyeron a las ocho horas, el fútbol uruguayo sigue dando sobrados ejemplos de que a nuestros exponentes no les significa ninguna deshonra el ponerse el overol cuando el fútbol no da para parar la olla. Como alguna vez hizo Obdulio laburando en la contru, como Carlitos Camejo en el puesto de verduras, un Heber Silva Cantera de cartero, un Rifle Pandiani de basurero o más acá con un Romario Acuña laburando de pintor o un Aníbal Hernández ayudando en el puesto familiar, el Caballo José Enrique De los Santos contó en una reciente nota sobre sus diversas actividades lejos de los flashes mediáticos y el brillo de algunas luminarias europeas.
Luego de que este patrón del área se retirara jugando en Basañez en el 2005, la tuvo que remar en varias changas para arrimar el sustento a la familia. Fue así que manejó un camión, una ambulancia, y hasta trabajó de sereno metiendo horas extras.
“Vos viste como es la cosa. Cuando uno no está trabajando tiene que salir a rebuscársela de alguna forma y a veces no se encuentran los lugares adecuados y se hace difícil. Me abrieron las puertas en un lugar y muchas veces me quedaba de noche para poder meter horas de trabajo. Ellos me conocían y sabían que lo mío era el fútbol, que en cualquier momento una nueva oportunidad podía salir y nunca me pusieron reparos. Siempre me ayudaron y les estoy agradecido”, cuenta el rústico zaguero, hoy trabajando nuevamente en el fútbol.
Uno de tantos luchadores de la vida, como siempre tuvimos y tendremos los que pregonamos esta línea obdulista con la que se debe enfrentar la vida. De los que no tienen vergüenza de golpear puertas para pedir trabajo cuando la cosa no camina, esos son los que decimos que no pueden estar fuera del fútbol. Jugadores y ex jugadores que andan en ómnibus, que son como cualquiera de nosotros y adentro de una cancha defienden la plata como el que más. Hoy va por esos gladiadores muchas veces anónimos que no comen sushi ni hacen capkeis o como mierda se llame.
Salú Caballo De los Santos, salú a los laburantes del fútbol. QUE VUELVA EL JUGADOR OBRERO, QUE VUELVA LA CELESTE DE ANTES!