¿Qué fue del “todo pelota”? Aquel principio que hacía que el fútbol fuera un deporte mucho más digno parece estar desapareciendo. Pareciera que mucha gente no hubiera nacido en la tierra de Obdulio, del Peta Ubiña, del Pepe Sasía, del Mudo Montero Castillo… Después de escuchar y leer tantas cosas que dice la gente, no nos queda otra que expresar nuestro parecer sobre el enfrentamiento entre nuestros players Luis Alberto Suárez y Diego Roberto Godín en fields europeos. Porque está bien que se horroricen en el viejo mundo, porque nunca van a entender nuestra manera de sentir el deporte, pero ¿que se asombren nuestros propios conciudadanos? Eso sí que no lo podemos permitir, estimados camaradas.
Como siempre hemos expresado, nos gustan los jugadores como éstos, embajadores de la verdadera Garra Charrua. Usted obdulista, espera que un defensa defienda así como Godín yendo sin piedad al encuentro del foguar de turno, y que los foguar vayan como un tanque de guerra en cada pelota sin importar quien esté enfrente. Uno lo quiere hacer y el otro lo quiere evitar, así de sencillo. En el medio, que pase lo que tenga que pasar.
Lo que es inadmisible es ver a compatriotas juzgar mal a sus propios jugadores, a los que después van a alentar enceguecidos por el exitismo y el calendarismo. Usted, señor/a hincha “Sudafrica 2010” debe entender que en Uruguay siempre se jugó así, y que estos jugadores son nacidos en esta tierra, con cédula, credencial y pasaporte oriental al día. Afuera de la cancha, hermanos; adentro no nos conocemos y defendemos la camiseta a morir. Porque así somos, cada jugada es la vida. Si a Godín se le hinchó un ojo, no necesita ningún “pobrecito el capi”, se debe a que es un aguerrido bá que tuvo una batalla feroz contra un centrefoguar con maña y que se impone en el área rival.
Que no vengan ahora de afuera ni de adentro a querer sembrar la duda o la división donde no la hay. Lo único que hay son dos gladiadores que sienten el fútbol de la misma manera, y que seguro se comieron un asado después del match. Pero adentro del terreno de juego, cero concesiones. A la cabeza que no renguea, así se concibe el juego de la pelota en nuestro país. Así nos ganamos el respeto del mundo. Los defensas deben ser recios y de ser posible, feos y meter miedo. Y los delanteros tienen que ir a romper y no dejarse pasar por arriba.
Por algo la mayoría del mundo conoce y aprecia de sobra a los players orientales, los que no van a medias, no van inseguros, no piden permiso y en la cancha no conocen ni a la madre. No echemos a perder la obra de tantos legendarios guerreros, así se entiende el fútbol en Uruguay y si usted quiere sobresalir por mucha calidad que tengas si no mete de lo que nos se compra en la farmacia váyase a su casa a jugar al ludo. Así de simple. Todo pelota señores! QUE VUELVAN LOS ROCES DE ANTES, QUE VUELVAN LA CELESTE DE ANTES!