El pelado Zidane es casi uno de los nuestros. Un tipo con la calidad de los más grandes, pero con la sencillez de los más humildes. Amigo de todos los uruguayos con los que jugó, el hombre del cabezazo más famoso de la historia de los mundiales junto con el de Púa y el Chengue fue el que le enseñó al Mago Fabián como poner una heladerita en la parte de atrás de la bañadera.
Zidane y el Mago compartieron cancha entre 2000 y 2001, durante el pasaje de O’Neill por la Juventus y en un momento en que el plantel del equipo italiano contaba con 5 uruguayos (Montero, O’ Neill, Carini, Zalayeta y Fonseca). La prensa italiana y hasta los dirigentes de la Juventus veían a Fabián como “el sucesor de Zidane”. Según se cuenta, O’ Neill no tardó en hacerse querer dentro del plantel de la Juventus, y a los pocos días ya le decía “Negro” a Edgar Davids y “Mostro” a Zidane.
Es sabido que Zidane admiraba la calidad y las condiciones del Mago, al punto de decir que fue el mejor jugador con el que jugó en su vida. El francés y el isabelino tuvieron una afinidad futbolística especial, destinada a los fenómenos de verdad. Los dos cracks hablaban el mismo idioma dentro de la cancha, como dijo Paolo: “Ellos se elegían en las prácticas y ganaban todos los partidos. Jugaban siempre entre ellos. En las prácticas era toque y toque, te pintaban la cara. Toque y toque, toque y toque, aparte los dos le pegan muy bien con las dos piernas. A ver, estamos hablando de dos fenómenos”.
En la biblia del Mago “Hasta la última gota”, Montero confirma que el francés admiraba a O ´Neill, algo que escuchó de la propia boca de Zinedine: “Zidane ha dicho que el mejor jugador que vio él fue el Canario. Lo ha dicho a nivel público y todo”.
¿Cómo define Fabián a Zidane?“En la Juventus me hice amigo de Zidane, también de Igor Tudor, todos tomadores, y salíamos por ahí. Como homenaje a Zidane, le pedí a un amigo de mi banda que pinta espectacular que lo dibujara en la pared del club; lo empezó antes de la final de Mundial 2006. Zidane es un fenómeno, por eso lo tengo ahí y le puse todas las copas al lado. Aquél sabe que yo estoy acá por Paolo , que viaja seguido; Zidane es un espectáculo, era completo: gente fuera y dentro de la cancha. Ahí jugué de 5, no podía jugar de 10 porque estaba el monstruo. Es mejor jugar de 5 porque ves a los delanteros y a los laterales que suben. Cuando jugás de 10 estás de espaldas y perdés panorama de juego, es difícil y te vas a comer 20 patadas más jugando en esa posición. Jugando de 5 me echaron mil veces, casi lo empaté a Paolo y mirá que lo echaron en Italia, no sabía pegar y era rayado”.
Por su parte, Zidane se sacó el gusto. Ya puede leer y recordar sus vivencias con O’Neill en la biblia del Mago. Si Zidane es amigo del Mago, es amigo nuestro. Grande pelado, por reconocer la magia del gran Fabián y haber derrochado Viejos Valores dentro y fuera del campo. QUE VUELVAN LOS CRACKS DE ANTES, QUE VUELVA LA CELESTE DE ANTES!